Cuando en dos grandes blog de referencia como son los de Cris (Kanela y Limón) y Silvia (Mi Dulce Tentación) ves que tienen este pastel que además pone "inteligente" no queda por otra que probarlo, ya se sabe la curiosidad mató al gato, pero si estas dos blogueras recomiendan que se haga, y además ves que tiene una pinta estupenda (por cierto a ellas les quedo mejor), no queda por otra que liarse la manta a la cabeza y ponerse al lio. El resultado ES-PEC-TA-CU-LAR, las tres capas que se forman durante el horneado pese a ser una única masa es lo que hace de este pastel que adquiera el calificativo de inteligente, el se sabe colocar, tiene un regusto como a quesada pero con la textura superior de bizcocho.
Se que en casa se volverá a preparar porque nos ha encantado, bueno aunque creo que los que mas lo han agradecidos han sido Rubén y Sonia, porque últimamente les tengo de conejillos de indias y les dà una buena cantidad.
INGREDIENTES:
- 8 yemas
- 8 claras a punto de nieve
- 1 l de leche tibia
- 250 gr mantequilla derretida y fria
- 280 gr azúcar
- 225 gr harina
- 2 cdas vainilla
- ralladura de un limón
PREPARACIÓN:
Batimos las yemas junto con el azúcar y la esencia de vainilla hasta tener una crema espumosa. Después se añade la mantequilla, la leche y se mezcla bien. Agregamos la harina tamizada y la ralladura de limón que mezclaremos bien todo junto.
Por último se incorporan las claras con movimientos envolventes.
Volcamos sobre un molde engrasado yo he utilizado uno de 20x30x6 (pero tenÃa mucha cantidad de masa y me han salido 2) aunque Silvia usó uno de 25x25x6, no se que habrá pasado.
Introducimos en el horno precalentado a 180ºC durante 10 minutos, después bajamos la temperatura a 160ºC y dejamos otros 50 minutos. Está listo cuando al pinchar salga el palillo limpio.
Dejamos enfriar totalmente y cortamos en porciones. Según Cris no se puede desmoldar.