El finde tuvimos partido, bueno a decir verdad, lo tenemos todos los findes. Y todo desde que al fin tras años de insistencia por parte de Samu para que le apuntemos a un equipo este año, por fin lo ha conseguido. La verdad es que yo no soy de fútbol, pero vamos que suelo ir porque al ser el niño y sus compañeros es distinto. Y ahora los padres vamos mas o menos conociéndonos y se hace equipo.

Bueno lo malo que hay días que llegas a casa a las mil y lo de comer, pues un lío. Este finde no quise dejar nada hecho, y me decanté algo rápido pero no por ello menos rico y es que gracias a los Maggi Fusian, en 3 minutos tienes un plato de Yakisoba classic listo para comer. En este caso aproveché que venia en Degustabox, pero en cualquier super lo encuentras con facilidad. Para hacerlo un poco más completo he añadido verduras, he usado de las bolsas congeladas que también encuentras en el super para tipo wok, y unos champis y trigueros frescos. Resultado que mientras se duchaba el futbolista y ponemos la mesa estaba la comida lista.

Así que nada de decir que no se puede comer rico y rápido, porque te acabo de demostrar que con 10 minutos tienes un plato listo.

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INGREDIENTES (2p):

• 1 paquete yakisoba Maggi Fusian
• Verduras congeladas para wok
• champiñones
• espárragos trigueros
• 300 ml de agua

PREPARACIÓN:

Ponemos en una sartén honda un poco de aceite y salteamos los champiñones que hemos limpiado y cortado en láminas, también agregamos los espárragos cortados y lo salteamos. Cuando estén listos agregamos las verduras y cocinamos hasta que estén hechos.

Agregamos las bolsas de los Yakisoba y el agua, después los fideos y removemos para que se hagan. Tras unos 3-4 minutos, lo tenemos listo para comer.

Sí ya sé que hoy ya no es San Valentín, pero es que preparé este brownie para la familia y amigos y no podía publicarlo antes de que lo viesen porque si no ya no es sorpresa, verdad? Aunque celebrar el amor por los nuestros o hacer un brownie no requiere de un dia especial.

Debo decir que los brownies me encantan y a lo largo de los años en el blog puedes descubrir bastantes:  tanto blondies que son de chocolate blanco (de albaricoque, de frutos rojos, ...) como de chocolate negro como es de origen pero además les puedes encontrar con queso, con café, pera, frambuesa... vamos hasta navideños.

Si es que la variedad es siempre lo mejor, así que no se puede decir que no puedes encontrar un brownie que no te guste. Además es un postre muy fácil, ya que no requiere de mucha elaboración, prácticamente es mezclar los ingredientes al molde y horno.

Igual lo más complicado de todo es esperar que enfríe para poder comerlo, pero vamos que un brownie calentito también es lo más, pero espera un rato a que salga del horno y enfríe un poco.

En esta ocasión he utilizado cacao de Cacaolat, me entro en la última Disfrutabox y quería aprovecharlo en algo muy rico, porque si por si solo esta buenisimo en este brownie le da un toque genial.

Ya sabéis que en casa recibo esta cajita llena de cosas interesantes tanto de alimentación como hogar o belleza, la verdad es que es muy completa. Si tu también quieres disfrutarla, entra en su web y suscribete, si usas mi código BRUJITANELACOCOINA la primera caja te va a costar solo 9,99€ incluyendo los gastos de envío, asi que está muy bien para probar.

Yo os dejo con la receta y a disfrutar de ella y de los seres queridos.

INGREDIENTES (20 CM):

• 95 gr harina
• 15 gr cacao en polvo Cacaolat
• 1 cucharada de Maizena
• 75 gr chocolate al 55%
• 3 huevos L
• 120 gr azúcar blanca
• 80 gr azúcar moreno
• 1 cucharadita de vainilla
• 110 ml aceite girasol
• 1 cucharada emulsión red velvet
• 1 cucharada de vinagre blanco
• 180 gr chocolate blanco picado

PREPARACIÓN:

Tamizamos en un bol la harina junto con el cacao y la maizena, reservamos.

Derretimos el chocolate al baño maría o al micro y dejamos atemperar.

Troceamos el chocolate blanco, metemos en un bolsa y al congelador mientras preparamos la masa.

Comenzamos a preparar la masa, para ello en un bol ponemos los azúcares junto con los huevos y batimos hasta que se mezclen bien, no necesitamos maquinas, con varilla manual es suficiente. Incorporamos la vainilla, el aceite en hilillo  y el chocolate derretido mientras seguimos batiendo la mezcla.

Ahora es el momento del color, yo le he puesto emulsión de Red Velvet porque tiene mucha potencia, si no tienes, pues un un buen colorante en gel rojo y después el vinagre.

Ya tenemos lista la masa en cuanto a ingredientes líquidos, ahora es el momento de los secos que ya teníamos tamizados.

Lo agregamos y con una lengua lo mezclamos bien. Añadimos el chocolate picado dejando un poco para poner por encima antes de hornear.

Vertemos la masa en el molde previamente engrasado y con papel. Metemos en el horno precalentado a 170º C durante unos 30-40 minutos.

Una vez listo, sacamos y dejamos enfriar. Derretimos un poco de chocolate blanco y decoramos junto con corazones de azúcar.

Decía Grande Covián que la hamburguesa bien hecha es un plato muy completo, ya que lleva, proteína, hidratos y verdura. Pues yo además le he puesto fruta y lácteos, así que no puedo decir nada más al respeto.

Usando productos de calidad la comida siempre está mucho mejor, en este caso hoy me he decantado por unas hamburguesas de pollo crunchy, a los niños les gusta mucho por el toque crujiente, y la verdad es que a mi me da lo mismo, lo importante es que coman.

El pan que he usado es de Dulcesol, los rústicos, porque son blandos para los peques pero aguantan bien sin romperse.

He preparado también una crema de queso, un poco diferente para acompañar, va tanto en la hamburguesa como para untar las patatas.

Esta vez no especifico cantidades porque va un poco al gusto y dependendiendo la gente que vayáis a ser, pero la idea esta clara, verdad??

INGREDIENTES:

• panes rústicos dulcesol
• hamburguesa crujiente
• manzana
• lechuga
• bacon
• queso

PREPARACIÓN:

Vamos a preparar la crema de queso, para ello en un cazo primero es pochar la cebolla bien picadita, cuando empiece a dorar, le agregamos el queso y ponemos a fuego suave. Agregamos leche hasta cubrir y dejamos cocinar.

Cuando tengamos la salsa con la textura deseada, agregamos sal, nuez moscada, la miel y mostaza. Mezclamos todo muy bien.

Cortamos la manzana en rodajas y pasamos por el sartén para ablandar. También el bacon.

Para el montaje de la hamburguesa, ponemos en las tapas del pan una capa de crema de queso, después la hamburguesa de pollo crujiente, encima el queso, bacon, manzana y terminamos con la lechuga.

La crem anos sirve también de acompañamiento para las patatas fritas.